La novela policiaca mediterránea
Para los amantes de la novela policiaca, reproducimos las opiniones del escritor Petros Márkaris, en una reciente entrevista concedida a Enric González para El País, (Babelia, nº1076, 07.07.12, pp. 4-6), en la que se declara miembro de una corriente literaria mediterránea y defiende la existencia en el sur de Europa de una novela policiaca con características propias y opuestas a las de la novela de los países nórdicos:
Para los amantes de la novela policiaca, reproducimos las opiniones del escritor Petros Márkaris, en una reciente entrevista concedida a Enric González para El País, (Babelia, nº1076, 07.07.12, pp. 4-6), en la que se declara miembro de una corriente literaria mediterránea y defiende la existencia en el sur de Europa de una novela policiaca con características propias y opuestas a las de la novela de los países nórdicos:
" El sur produce una novela policial específica*. Para empezar, tiene un alto contenido social y político*. Otra característica es su relativa ausencia de brutalidad*, en comparación con la novela policial nórdica. Supongo que tiene que ver con el hecho de que el sur ha tenido que enfrentarse, política y socialmente, con la brutalidad: dictaduras, fascismos, mafias Un escritor sueco, en cambio, tiene que demostrar que no todo es idílico en su sociedad y por eso recurre a la violencia. El tercer factor, muy importante, es la cocina*. Pepe Carvalho, o el Montalbano de Andrea Camilleri, o el propio Jaritos, aman comer bien. Con los escritores nórdicos se tiende a la cerveza y los bocadillos. Lo de la cocina tiene mucho que ver con la posición de la mujer en la sociedad. En el centro y el norte de Europa, la emancipación de la mujer ocurrió antes y ya hace años que se liberaron de la condición de amas de casa. Eso fue bueno para la mujer, pero malo para la cocina. Los griegos de mi generación, y en general los mediterráneos, tuvieron madres que eran amas de casa. En nuestra infancia la comida fue un asunto relevante. Y por eso acabamos metiéndola en las novelas. Y aún una última cosa: la ciudad*. Si usted lee una novela de Agatha Christie, no hay ciudad detrás. En nuestras novelas mediterráneas la ciudad no es solo un escenario, como ocurre frecuentemente con la novela estadounidense, sino un personaje. Si uno ha leído a Vázquez Montalbán, llega al restaurante Casa Leopoldo y le es completamente familiar".
* Sin negrita en el original.
Una interesantísima entrevista que puedes leer completa en:
Más información sobre el autor en
este blog:
Efectivamente...es lo que hablábamos antes, en el otro artículo sobre este Jaritos: una novela de estas es inménsamente más rica que las que yo conozco anglosajonas (las escandinavas no las he leído
ResponderEliminarCarlos San Miguel