domingo, 18 de junio de 2023

"La misa de amor", romance

 



LA MISA DE AMOR

Mañanita de San Juan,
mañanita de primor,
cuando damas y galanes
van a oír misa mayor.
Allá va la mi señora,
entre todas la mejor;
viste saya sobre saya,
mantellín de tornasol,
camisa con oro y perlas
bordada en el cabezón.
En la su boca muy linda
lleva un poco de dulzor;
en la su cara tan blanca,
un poquito de arrebol,
y en los sus ojuelos garzos
lleva un poco de alcohol;
así entraba por la iglesia
relumbrando como sol.
Las damas mueren de envidia,
y los galanes de amor.
El que cantaba en el coro,
en el credo se perdió;
el abad que dice misa,
ha trocado la lición;
monacillos que le ayudan,
no aciertan responder, non,
por decir amén, amén, 
decían amor, amor.

NOTAS:
-mantellín de tornasol: especie de mantilla con reflejos tornasolados.
-cabezón: tira de lienzo doblada que forma el cuello de la camisa.
-arrebol: color rojo usado para dar color a las mejillas.
-garzo: de color azulado.
-alcohol: polvo negro muy fino y perfumado usado para alargar los ojos.

Menéndez Pidal, en su Flor nueva de romances viejos, comenta sobre este romance, perteneciente al grupo de romances líricos, lo siguiente:

  "Este encantador romance podría servir de muestra del artificio que suele creerse extraño a la poesía popular. Un gracioso y suave refinamiento domina en él, desde el dejo de inocente irreverencia en su asunto, hasta su embelesarse en los afeites de la dama, olvidando por completo las gracias naturales de la hermosura.
   Sólo conocemos una versión antigua de este romance, conservada por casualidad en cierta glosa hecha por Antonio Ruiz de Santillana en el siglo XVI. Versiones modernas faltan casi por completo en el centro de la Península; sólo las tengo de Cáceres, Salamanca y Segovia; en cambio, abundan mucho en Cataluña y también entre los judíos de Oriente.
   La versión catalana, única conocida a mediados del siglo pasado, adorna a la dama con las armas de la casa real de Aragón; por lo cual Milá, en 1853, creía que este romance era originariamente catalán, y que acaso envolvía el recuerdo de la hija de Jaime I; mas una vez divulgada la versión castellana del siglo XVI descubierta por Wolf, el mismo Milá, en 1874, allegándose al parecer del descubrimiento, supuso que el romance catalán era derivado de una versión castellana afín a la del siglo XVI. Esta suposición se convierte en certidumbre ahora que nosotros hemos encontrado tantas hermosas versiones de los judíos de Oriente y de otras provincias del reino de Castilla".

Puedes escuchar este romance, cantado por Amancio Prada: AQUÍ.

Otros romances medievales en este blog:
-"Romance de la doncella guerrera": AQUÍ.
-"Romance del amor más poderoso que la muerte": AQUÍ.
-"Romance del prisionero": AQUÍ.
-"Romance del infante Arnaldos: AQUÍ.

[Imagen: humanidades.com]

6 comentarios:

  1. ¡Pero cuánto me gusta este romance
    ¡Yo también soy de los que se lo aprendieron de memoria. Aunque por gusto, porque los obligados (en quinto de EGB) eran el de Abenámar y el del Prisionero jajaja
    Ah, pues no sabía yo de esa primera e hipotética vinculación a la Corona de Aragón... Ni que los sefardíes lo digan recordando, que me parece algo muy hermoso.
    Y algo que siempre me pregunto es si nunca se conservó las músicas originales de los romances con las que los acompañarían los troveros de la época; es más si hubo una música original en una primera redacción -por fuerza el autor original tubo que escribirla para componerla- o sólo escribió un poema al que luego cada intérprete acompañó como quiso. ¡Qué misterios tan agradables
    ¡Muchas gracias por este clasicazo de los 40 Principales de la época jejeje
    Carlos San Miguel

    ResponderEliminar
  2. No me ha gustado demasiado la versión musical... no sé... ¡es que me parece poco medieval
    Carlos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No es el mejor trabajo de Amancio Prada, desde luego.

      Eliminar
  3. Y una cosa que me ha llamado la atención de las palabras de Menéndez Pidal es el efecto gracioso o paródico de que el narrador no alaba realmente e la hermosura natural de la dama sino esa otra "postiza" que consigue con tanto afeite y tanta ropa lujosa. No es hermosa, pues, sino que lo parece.
    Nunca había pensado en ello... ¡pero yo estaba enamorado de esa dama del siglo XV y ha conseguido derribar un mito
    Carlos

    ResponderEliminar
  4. https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/el-romancero-y-su-musica-2/html/

    ResponderEliminar