domingo, 23 de marzo de 2014

"Balada del cautivo", de José Verón Gormaz


         BALADA DEL CAUTIVO

Más allá de esta triste ventana está la noche.

Las estrellas sin nombre
                             que hacen grandes los cielos;
el misterio de Venus,
                             rima y fulgor de vagabundos;

vestal del firmamento
                               la luna,
                                   de pálida llamada,
heraldo del abismo y de los lobos.

Más allá de esta triste ventana está la noche.

Dicen viejas palabras
                                 que allí sólo hay enigmas.

Apenas un cristal,
                               apenas nada,
ha creado una isla de inmensidad nocturna.

Más allá de una triste ventana
                                             está la noche.

Cómo llegar a ella.

Cómo sentir,
                     cómo ser la materia y la sal
                                     de las ascuas finales
renovando el color de su eterna agonía.

La oscura desnudez llama al silencio,
bebe silencio,
                da sentido al silencio:
                                   funde piedra y palabras.
Tras la ventana,
                                afuera,
                                               los enigmas;
el abismo está dentro.

                                  José Verón Gormaz, de Baladas para el tercer milenio, 1987
                     
 José Verón Gormaz (Calatayud, Zaragoza, 1946) es poeta, narrador y fotógrafo. Se define
José Verón Gormaz
como poeta de los espacios abiertos, pero también del paisaje urbano y poeta del tiempo. Aficionado a la copla y al epigrama, en su obra poética combina el clasicismo y la experimentación. Ha publicado
, entre otros, los siguientes poemarios: Legajo incorde (1980), Baladas para el tercer milenio (1987), Auras de Adviento (1988), A orillas de un silencio (1995), Epigramas del último naufragio (1998), Rayuela blues (2000), Cantos de tierra y verso (2002), La llama y la sombra (2003), la trilogía El tránsito y la duda -formada por El exilio y el reino (2005), En las orillas del cielo (2007) y El viento y la palabra (2010)- y Ritual del visitante (2012).  Es autor, asimismo, de  obras de narrativa como La muerte sobre Armantes (1981, 2006), La letra prohibida (2004) y Las puertas de Roma (2012).
    Ha recibido numerosos premios por su producción literaria y artística: premio San Jorge en 1984, premio Hermanos Argensola en 1999, Premio Nacional de Fotografía (CEF, 2000), Medalla de las Cortes en 2006 y premio de las Letras Aragonesas 2013.

Según se indica en la solapa de Baladas para el tercer milenio, el libro "reúne un conjunto de poemas influidos por un sentimiento de cambio".
La herencia cultural se esconde tras una cortina de urgencias. Los viejos mitos mueren o se transforman, como si se pretendiera que la misma vida fuese un mito. El poeta, identificado con el presente, contempla las dos vertientes temporales (pasado y futuro) y no puede evitar la duda.
Actualización (11 de septiembre de 2021):
José Verón Gormaz, hijo predilecto y cronista oficial de Calatayud,  falleció en su ciudad natal el 10 de septiembre de 2021, tras una larga enfermedad.

Otro poema del autor en este blog:

Foto: José Verón Gormaz

1 comentario:

  1. ¡Corcho! Esa foto parece un cuadro de los impresionistas...¡magnífica!
    Otro prisionero poético; pero éste lleva las cadenas dentro de sí.
    La Noche es lo que tiene, que es muy relajante. A mí, el crepuscy vespertino me angustia pero luego, la noche, me libera de esa tristeza. ¿Será como cuando temes algo (una reunión con desconocidos, la"mili", un trabajo...) y compruebas que no es malo e incluso disfrutas esa situación? ¿tememos la oscuridad en el crepúsculo -trasunto de la Muerte- y luego comprobamos que aporta serenidad y sosiego?
    Carlos San Miguel

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