viernes, 29 de diciembre de 2023

Los mejores libros de 2023: cómics

Seleccionamos 15 de las mejores novelas gráficas –siete del ámbito internacional y ocho del nacional- que nos ha dado el año que está a punto de terminar, basándonos en las críticas de la prensa general y cultural españolas y en las de portales especializados. La información sobre los libros procede de las páginas webs de las editoriales respectivas.


 CÓMICS INTERNACIONALES 

1.       Monica. Daniel Clowes. Trad.: Alberto García Marcos y César Sánchez. Fulgencio Pimentel, 108 págs.

Estructurado en relatos aparentemente divergentes, Monica aborda la vida del personaje que da título al libro, posiblemente el más complejo y personal de la carrera de su autor. Rico en detalles visuales, con un oído impecable para el lenguaje y el diálogo y giros fascinantes, Monica es una obra maestra densa y multicapa que alude a muchos de los géneros que han definido el medio —bélico, romance, terror, crimen, sobrenatural—, pero de una manera misteriosa, inclasificable y quintaesencialmente clowesiana que incita a las relecturas.

 

2.   
Patos: Dos años en las arenas petrolíferas. Kate Beaton. Trad.: Gema Moraleda. Norma Ed. 436 págs.

En Patos, Beaton no nos cuenta cómo el capitalismo extrae, explota, mercantiliza y aliena. Tampoco nos lo muestra. Refleja la vida en un campo de extracción en arenas petrolíferas con gran detalle y nos permite llegar a conclusiones por nosotros mismos, de la misma forma que lo hizo ella cuando se trasladó allí para trabajar a los veintiún años. El efecto es abrumador. A pesar del alto precio que tuvo que pagar a nivel personal, Beaton ha tejido con sus experiencias un vasto y complejo tapiz en el que ha captado la humanidad de la gente que hace este trabajo sucio del que somos cómplices, y que brilla gracias a su compasión.

 

3. 
La sangre de la virgen. Sammy Harkham. Trad.: Alberto García Marcos. Fulgencio Pimentel, 296 págs.

California. 1971. Un joven ambicioso trata de abrirse camino en la industria del cine de terror y bajo presupuesto. Dividido entre el desorden de su vida familiar y sus escarceos en la vida disipada propia de la profesión, la frustrante realidad de sus posibilidades en el oficio entra en pugna con sus aspiraciones como artista, mientras los acontecimientos se suceden guiados por la fatalidad y también por una cierta banalidad. Al fondo, las eternas bocinas de Los Ángeles.

 


4.      Alison. Lizzy Stewart. Trad.: Regina López Núñez. Errata Naturae, 176 págs.

Tan talentosa como ingenua, con apenas veinte años y recién casada, Alison vive en el tranquilo pueblo costero de Bridport, en Dorset, al sur de Inglaterra, donde es moderadamente feliz y también está moderadamente insatisfecha. Un día, en la biblioteca pública, un encuentro casual con un pintor maduro y afamado le hace replantearse su lugar en el mundo y finalmente abandonar las convenciones y sus raíces de clase trabajadora por la trepidante y exclusiva escena artística del Londres de finales de los ochenta. Al tiempo que la emoción del romance bohemio se diluye sin remedio en la decepción, Alison va descubriéndose y abriéndose camino gracias al arte, la belleza y la amistad.


5.     
Roaming. Jillian Tamaki y Mariko Tamaki. Trad.: Rubén Lardín. La Cúpula, 448 págs.

Zoe y Dani son íntimas desde hace años. En sus primeras vacaciones como estudiantes universitarias, planean reencontrarse en el lugar que siempre han querido visitar: ¡Nueva York! A última hora se les une Fiona, un espíritu libre que pronto amenazará con arruinarles el viaje y puede que algo más… El inesperado florecimiento de un romance abrirá fisuras que pondrán a prueba una amistad de largo recorrido, dejando a sus protagonistas atrapadas en ese lío que supone descubrir quién eres cuando aún no estás seguro de a dónde vas. Evocadora y llena de vida, esta singular y elegante visión de un paraíso urbano revelará lentamente sus imperfecciones al son de los ritmos de sus tres visitantes.

 

6.     
Walicho. Sole Otero. Salamandra Graphic, 376 págs.

Atravesando más de dos siglos de historia ancestral, entre 1740 y la actualidad, Walicho emerge como un sorprendente y mordaz relato coral en el que las distintas y dispares historias – desde tres extrañas hermanas que llegan a Buenos Aires en un barco colonial acompañadas de una cabra decrépita hasta una pareja que estalla en crisis justo antes de mudarse – confirman un fresco que combina terror y comedia para hablarnos de animismo, poder femenino y brujería.





7.  
Querido Callo. Aline Kominsky-Crumb. Trad.: Montserrat Meneses Vilar. Reservoir Books, 216 págs.

Cerca de 1970, la ciudad de San Francisco y sus alrededores se convirtieron en el epicentro del movimiento underground comix. En aquel ambiente, en el que se promulgaba una nueva manera de hacer historietas y los dibujantes hablaban sin tapujos de sexo, drogas o salud mental, las tiras del Callo, el personaje autobiográfico de Aline Kominsky, brillaban por su fascinante irreverencia. En este volumen están reunidas todas ellas. Por primera vez, el deseo, la relación con el propio cuerpo o las inseguridades del «ser mujer» se trataban de manera cruda y sin filtros. El Callo es descarado y chistoso, autodestructivo y exagerado. Pero también revela a una autora llena de vida, confiada en la honestidad de su arte y adelantada a su tiempo, capaz de mezclar la naturaleza contradictoria de la sexualidad con un feminismo complejo y orgulloso.

  

CÓMICS NACIONALES 

8.      Por culpa de una flor. María Medem. Apa Apa - Blackie Books, 336 págs.

La protagonista de esta historia vive en una aldea tan solo habitada por perros y salamanquesas. Todos los pueblos cercanos se han vaciado, todas las tierras parecen yermas. En la suya, o en lo que queda de ella, crece una flor que le recuerda los tiempos mejores. Que trae de vuelta la algarabía del pueblo y la fertilidad de los campos. Mantener con vida a esa flor es lo único que desea. Una visita inesperada le ayudará a emprender un viaje de autoconocimiento en el que se reencontrará con la vida que creía perdida y en el que aprenderá a cultivar la flor de sus desvelos. Para que ambas, pese a las lluvias y las ventiscas, florezcan.

 

9.      Ronson. César Sebastián. Autsaider, 128 págs.

Ronson es una barbaridad de libro. La historia se remonta varias décadas atrás, y a ojos de nuestras constreñidas mentes actuales, lo de barbaridad, puede superar lo estético y formal para llegar a lo moral. Un tebeo de infancia con carretadas de realidad verosímil. Realidad de pueblo, que puntúa doble que la urbana. Además, de pueblo de hace sesenta años, que es como hablar de otra galaxia en términos de usos y costumbres, digamos, más recias. Tiene ese rollo neorrealista con aire documental, con esos ritmos, esas composiciones y esos caretos. Sin necesidad de moralejas, finales felices o cualquier otra esclavitud argumental. Un tebeo entre sensible y descarnado que nos recuerda de dónde venimos. De la misa obligatoria, la pedrada al perro y las hostias a los niños sin preguntar. Pero también de la silla a la fresca, de jugar en la calle y las aventuras asalvajadas.

 

10.  
Contrition. Carlos Portela y Keko. Norma Ed., 168 págs.

Contrition es una pequeña localidad perdida en el condado de Palm Beach que acoge a un amplio número de exconvictos condenados por delitos sexuales. Estos residentes forzosos viven allí como en un limbo, marginados del resto del mundo. Cuando uno de ellos muere en un incendio en su propia casa, la policía atribuye el suceso a un accidente doméstico. Pero Marcia, una periodista local, sospecha que las apariencias engañan. El guionista Carlos Portela y el dibujante Keko firman un thriller modélico y espinoso que gira en torno a una cuestión moral: ¿es posible la redención?

 

11.   
El cielo en la cabeza. Antonio Altarriba, Sergio García y Lola Moral. Norma Ed., 144 págs.

Para Nivek, el horizonte termina en las inmediaciones de la mina de coltán donde trabaja. Después de sobrevivir milagrosamente a un derrumbe, este tendrá que emprender un viaje monstruoso, aterrador y sin retorno por las bellas, traicioneras y mágicas tierras de África en un trayecto cuya distancia no se mide en kilómetros, sino en horrores y en vidas humanas. Una epopeya gráfica actual con ecos de tragedia y realismo mágico basada en una infortunada verdad: la de los miles de inmigrantes africanos rumbo a las costas de Europa.

 

12.   El abismo del olvido. Paco Roca y Rodrigo Terrasa. Astiberri, 296 págs.

Paco Roca viaja a nuestro pasado con El abismo del olvido para recuperar, junto al periodista Rodrigo Terrasa, la historia real de Leoncio Badía (joven republicano obligado a trabajar de sepulturero) y de José Celda (fusilado y enterrado en una fosa común), ejemplo de las decenas de miles de españoles que fueron represaliados de forma salvaje por el régimen franquista. Pero también acompaña a Pepica Celda, hija de José, que tenía 8 años cuando mataron a su padre y, ya octogenaria, espera poder recuperar por fin sus restos para restaurar su dignidad. Un desgarrador laberinto que intenta desentrañar las miserias de un país obsesionado con despreciar su memoria.

 

13.  
Aquí hay avería. Lorenzo Montatore. ECC, 336 págs.

Viti, invadido de droga, vestido de brujo culpable, de violeta y vicio, con el cabello incendiado, no tiene boca porque solo necesita un ojo para comulgar en el sagrario del cuarto de baño. Surge en la noche arrastrado por las corrientes rubias, poseído por el delirio amarillo, patético en su patetismo, se detiene un momento a observar las estrellas que inventan líquidos y recuerdos. Una sola gota nubló su juventud, y ahí sigue esperando a sus amigos, que ya se fueron para siempre sin despedirse. “Una última fiesta” se dice sabiendo que será mentira, y recorre otra vez la elipsis del pasillo que lleva al servicio, su palacio oscuro y sucio, para alumbrarlo de llanto. Aquí hay avería es una aventura lisérgica, entre trágica y cómica, en la que Lorenzo Montatore ofrece su particular visión sobre las drogas y la autodestrucción.

 

14.  
La alegre vida del triste perro Cornelius. Marc Torices. Apa Apa, 392 págs.

El perro Cornelius es un pobre diablo. Siempre es cabeza de turco y objeto de toda crítica. ¡Es el saco de boxeo de sus amigos! Tenerlo cerca permite despreocuparse e incluso descansar: los mosquitos le pican sólo a él, pisa todas las mierdas y tropieza con todas las piedras. Tan solo una cosa se le da bien, y es... ¡ser él mismo! Este es el mayor y más completo recopilatorio de sus andanzas, meteduras de pata y despropósitos, el cómic definitivo sobre este antihéroe milenario, a quien todos vapulean pero también… ¿quieren? 

 



15.   Planeta. Ana Oncina. Planeta Cómic, 224 págs.

Valentina vive en una pequeña y acogedora cabaña en medio del bosque con su perra Sopa, le encanta su autonomía y estar en contacto con la naturaleza. Cada noche tiene un sueño, vive aislada en otro planeta con Ane, su pareja. Y aunque todo es demasiado extraño, demasiado blanco y demasiado silencioso, parece que Ane y Valentina están hechas la una para la otra. Pero, ¿es Ane real?, ¿hasta qué punto esa realidad alternativa es un sueño?

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