domingo, 19 de octubre de 2014

"Nubes", de José Emilio Pacheco



                    Nubes

En un mundo erizado de prisiones
Sólo las nubes arden siempre libres.

No tienen amo, no obedecen órdenes,
Inventan formas, las asumen todas.

Nadie sabe si vuelan o navegan,
Si ante su luz el aire es mar o llama.

Tejidas de alas son flores del agua,
Arrecifes de instantes, red de espuma.

Islas de niebla, flotan, se deslíen
Y nos dejan hundidos en la Tierra.

Como son inmortales nunca oponen
Fuerza o fijeza al vendaval del tiempo.

Las nubes duran porque se deshacen.
Su materia es la ausencia y dan la vida.

           De Tarde o temprano. Poemas 1958-2009,

Tusquets, 2009

El escritor mexicano Carlos Monsiváis (1938-2010), compañero de generación de Pacheco, ha escrito sobre este poema: 
"Nubes"  es notable en varios sentidos, convierte un elemento del paisaje de siempre en un cielo autónomo, identifica a las nubes con la libertad y la potencia que no conocerán los mortales, hace del recorrido por el aire una empresa que sólo atisba por instantes la mirada, ese testigo tan hecho de fragmentos. 

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1 comentario:

  1. ¡Delicioso! Es muy relajante mirar al cielo y ver pulular las nubes por él. Y esas de tormenta de un gris, a veces verdoso, tan plomizo con sus descargas eléctricas entre ellas...¡espectacular. Pero para nada son libres, que son esclavas del viento. Y éste del calor o el frío; y éstos de las presiones provocadas por el sol... Aquí nadie somos libres. ¡Qué mentira es la libertad
    Carlos San Miguel

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