domingo, 4 de septiembre de 2011

"Defensa de la alegría", de Mario Benedetti



Defensa de la alegría

                       a Trini

Defender la alegría como una trinchera
defenderla del escándalo y la rutina
de la miseria y los miserables
de las ausencias transitorias
y las definitivas
defender la alegría como un principio
defenderla del pasmo y las pesadillas
de los neutrales y de los neutrones
de las dulces infamias
y los graves diagnósticos
defender la alegría como una bandera
defenderla del rayo y la melancolía
de los ingenuos y de los canallas
de la retórica y los paros cardiacos
de las endemias y las academias
defender la alegría como un destino
defenderla del fuego y de los bomberos
de los suicidas y los homicidas
de las vacaciones y del agobio
de la obligación de estar alegres
defender la alegría como una certeza
defenderla del óxido y de la roña
de la famosa pátina del tiempo
del relente y del oportunismo
de los proxenetas de la risa
defender la alegría como un derecho
defenderla de dios y del invierno
de las mayúsculas y de la muerte
de los apellidos y las lástimas
del azar
y también de la alegría.

(Mario Benedetti, de Cotidianas)

[Selección de la profesora Mª Luisa Mateo]


Otro poema del autor en este blog: “¿Qué les queda a los jóvenes?”
http://elhacedordesuenos.blogspot.com.es/2010/01/poema-de-la-semana.html

Un cuento del autor:


2 comentarios:

  1. En estos tiempos oscuros es más necesario que nunca defender la alegría, es imprescindible. Qué grande Benedetti.

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  2. Huy, con tanta amenaza, no me extraña que haya tan poca en este mundo. A pesar de los "proxenetas de la alegría" que menciona el poeta.
    Carlos San Miguel

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